Por Partido
Obrero Socialista – Liga de Unidad Socialista, México*
Si ves los noticieros de Televisa, TV Azteca o Canal 11, y
crees en lo que dicen sobre Venezuela, lo que aquí escribimos no te servirá.
Aquí afirmamos que la Mesa de Unidad Democrática –MUD- no tiene nada de democrática.
Lo mismo decimos del gobierno de Estados Unidos.
Si lees La Jornada y crees en lo que dice, tal vez la lectura
de esta investigación no que el presidente Nicolás Maduro y su partido no
tienen nada que ver con el socialismo.
La comprensión de lo que ocurre en este país exige de
lectores que no teman a la verdad y que la busquen aquí y allá, en todo tipo de
publicaciones, de testimonios, de puntos de vista. Esto es lo que hemos tratado
de hacer en esta revista. Las siguientes páginas sobre Venezuela han sido
extraídas de autores de diferentes corrientes políticas e ideológicas y los hechos
a que hacemos referencia son de fuentes confiables.
Te presentaremos una visión crítica tanto del gobierno de
Nicolás Maduro como de la oposición empresarial organizada en la MUD y, por
supuesto, del imperialismo norteamericano, la OEA y los gobiernos latinoamericanos.
Uno y otra representan a distintos sectores de la clase empresarial.
Aquí presentamos el punto de vista de la clase trabajadora y
otro concepto sobre la democracia y el socialismo. Defendemos el derecho del
pueblo a alimentarse todos los días, por encima de las reales o supuestas obligaciones
del país con los banqueros extranjeros. Tanto la MUD como Maduro coinciden en
que el país suramericano debe pagar la deuda externa. Nosotros estamos porque
se suspenda su pago.
Nos pronunciamos porque Venezuela cancele la intromisión del
capital extranjero en el petróleo. El PSUV y la MUD han abierto las riquezas
del país a los capitales extranjeros y se esfuerzan en congraciarse con Wall
Street y Washington.
En estas páginas igualmente pugnamos por una mayor
democracia para los de abajo, con la que ni Maduro ni la MUD están acuerdo. El
presidente ha cancelado las elecciones en los sindicatos, pues teme que su
partido PSUV las pierda. Y la MUD participó del golpe de Estado de 2002. Ni una
ni otro son demócratas.
Aquí señalamos la solución para los actuales conflictos y
problemas del país hermano. Es la hora de un gobierno basado en el poder de los
trabajadores, los campesinos y los indígenas, contrario a la fuerza de los
empresarios –chavistas o no de Washington, que independice al país del imperio
y construya una democracia para los de abajo.
El hambre se transformó en un levantamiento popular
El hambre se transformó en protestas y las protestas al aumentar
y volverse cotidianas se convirtieron en un levantamiento popular contra el
gobierno. Así lo describe desde Uruguay en la revista Brecha Tomás Straka:
“El gran telón de fondo de los más de cien días de protestas
y movilizaciones que ocurrieron de abril a julio de 2017, es una crisis
económica y social muy profunda que se ha agudizado por la caída de los precios
del petróleo. La gente que protestaba para que el gobierno le resolviera problemas
puntuales comenzó a protestar de forma cada vez más violenta. Si algo
caracterizó los cien días de movilizaciones que hemos vivido desde marzo fue
que sectores populares y usualmente chavistas se unieron de diversas formas,
aunque muchas veces con una agenda propia y hasta distinta a la de la
dirigencia opositora. Han sido objeto de una represión particularmente severa,
pero eso no ha logrado acallarlos.”
Protestan más los de más abajo
Según el boliviano Pablo Stefanoni, “las
protestas tienen más intensidad en algunos territorios, pero la afirmación de
que son solo los ricos de Altamira o del este de Caracas quienes se oponen al gobierno
es desmentida por la aplastante derrota del Partido Socialista Unido de Venezuela
(PSUV) en las elecciones de 2015.”
Una “rebelión popular”
Un agudo observador venezolano de lo
que ocurre en su país, Fernando Souza, escribió que “estamos en presencia de
una rebelión popular contra la dictadura burguesa madurista. “Millones están
luchando contra una dictadura que profundizará aún más el paquete económico de
ajustes más salvaje que conoció y sufrió el pueblo venezolano en la historia de
los últimos 100 años.”
“Pequeños caracazos”
En 1989 millones de caraqueños bajaron de los cerros en que viven
y se dirigieron a saquear tiendas y establecimientos comerciales. Ellos tenían
hambre. De acuerdo con el sociólogo venezolano Edgardo Lander, “en estos
últimos dos años se han producido a lo largo del país pequeños caracazos en
Cumaná, en Bolívar, en Maracay… Tenemos una mezcla de gente que sale a
protestar porque no consigue alimentos o porque no tiene gas, y también nos
encontramos con que hay mafias que aprovechan esa coyuntura para asaltar
negocios. Hay protestas espontáneas de la gente; todas estas cosas están ahí
juntas.”
Jóvenes estudiantes
El periodista argentino Juan Andrés Gallardo, dice que “es
quizá la juventud el sector social que más protesta. Son jóvenes, en su mayoría
de clase media, los que se ponen al frente de las movilizaciones de la MUD, se
enfrentan con la policía y mueren producto de la represión.
También están los jóvenes de los barrios populares que hacen
lo mismo, y no lo hacen bajo la ideología y el programa de la derecha, sino
bajo el de la falta de horizonte, el hambre y la desesperación. Allí no domina
la MUD, y la bronca con el gobierno de Maduro va en ascenso.”
Gallardo relata que en La Vega, en el mes de mayo, un populoso
barrio del suroeste de Caracas de larga tradición chavista, el retraso en la
entrega de alimentos se transformó en una protesta con más de 12 horas de
enfrentamiento entre los pobladores y las fuerzas armadas y paramilitares
chavistas.
“La represión, que fuera de Venezuela se muestra dirigida
exclusivamente hacia la MUD, es sufrida a diario por los jóvenes de los barrios
populares y contra aquel que cuestione al gobierno. En los últimos meses
reprimieron tanto a trabajadores en huelga de la Universidad Central, como a
médicos que protestaban por la falta de medicamentos o estudiantes liceístas
que salieron a las calles”.
La MUD también reprime
“Las fuerzas de seguridad son empleadas para aplastar
cualquier intento de saqueo por hambre. En este aspecto la MUD coincide con Maduro
y habilita la represión en los municipios que gobierna. En una reciente noche
de furia en Maracay, que comenzó como una protesta de derecha y se extendió a
los barrios humildes en forma de saqueos, la MUD pidió la intervención de la Guardia
Nacional, mientras que el líder empresarial de derecha Enrique Capriles definía
desde su cuenta de twitter la situación como de caos y anarquía.”, escribió
Juan Gallardo.
*Esta declaración apareció en El socialista 389. Septiembre de 2017.
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