La mano amiga que hace el oficio de bombero

x Jesús Valdez

Ixmiquilpan, Hidalgo, es una comunidad que forma parte del Valle del Mezquital, quienes unidos derrotaron heroicamente a la Policía Federal el pasado 5 de enero.

El domingo 8 de enero de 2017, el político mexicano Gerardo Fernández Noroña visitó Ixmiquilpan, Hidalgo; para dar un emotivo mensaje a la gente, donde propuso a la gente, que lo único que le faltaba a su movimiento, era el pacifismo con estas palabas: “cuando cercábamos el senado le decíamos a la gente:  todos sentados, todos sentados - ¿Oye Gerardo, si nos sentamos no nos van a madrear? - No, seguro nos van a madrear – Oye Gerardo no la chingues ¿entonces pa´ que nos sentamos?: Para que quede claro que los violentos son ellos” … “y si todo mundo se sienta, el que está de pie y está echando chingadazos es un infiltrado, el que está provocando violencia está en contra del movimiento”.. “pero si ustedes deciden enfrentarse, yo respeto” … “si se acordó sentarse, de una vez le decimos a la gente que no se va a sentar, que no venga, que no sirve”.

Son algunas de las palabras arengadas por quien vive del presupuesto y se ha convertido en el hazmerreír tanto de la izquierda, como de la derecha mexicana. Este político con sus palabras está del lado del pueblo y con sus acciones del lado del estado.

Son muchos los episodios ridículos que ha protagonizado en redes sociales, que van de acciones tan “radicales” como no pagar el impuesto de su Boing en tiendas departamentales, hasta sabotear el cerco al senado de la república que mantenían organizaciones sociales para impedir la aprobación de la reforma laboral a inicios del sexenio de Peña Nieto. En esa ocasión, convenció a los manifestantes de desbloquear el recinto a cambio de que entraran los líderes del SME y la UNT quienes entraron para hablar sobre sus intereses de gremio. Este cerco, hasta entonces había impedido que entraran los senadores de los diferentes partidos, pero al romperse, estos instalaron la asamblea legislativa… y aprobaron la reforma laboral, de la cual hasta el momento estamos pagando las duras consecuencias.

Otra mano amiga ofrecida al movimiento social, es la de López Obrador, quien el año 2006 fue a Oaxaca para demandar a la APPO que levantara todas las barricadas, por supuesto, los asistentes a dicho mitin lo mandaron muy, pero muy lejos. Por cierto, cuando se levantaron las barricadas a petición de algunas organizaciones sociales y de derechos humanos para que entrara una comisión del senado de la república a comprobar que en Oaxaca no existía gobernabilidad y se decretara la desaparición de poderes, sucedió lo contrario: comprobó que en Oaxaca si existía “un ambiente de paz y gobernabilidad, por lo tanto, la solicitud de desaparición de poderes le fue denegada.

A partir de entonces, existió la justificación política para comenzar la sangrienta represión del 25 de noviembre, arengando que sólo se trataba de “unos cuantos grupos radicales”. Con un movimiento debilitado el saldo fue de varios desaparecidos, cientos de personas intoxicadas por la cantidad de gases lacrimógenos, heridos de bala, más de 50 compañeros detenidos que fueron torturados por los sicarios de Ulises Ruiz Ortiz, entre otras cosas. Lo que quedaba del movimiento fue aplastado.

En el citado mitin de Noroña, anunció que sería candidato independiente, con posibilidades de “sumarse a otros esfuerzos”, claro está que esos otros esfuerzos son los de López Obrador por alcanzar la presidencia por la vía electoral. Para lograrlo, en una entrevista con Ciro Gómez Leyva en televisa, le ha dicho a la CNTE que no puede pedir la derogación de la reforma educativa, y que tampoco se debe exigir la caída de Peña Nieto, pues “debe de haber autorida´, debe existir gobernabilida´”

… Con esa clase de amigos, ¿para qué queremos más enemigos?