Jesús Valdez
El día sábado 21 de mayo de 2016,
marchamos algunos miles de padres de familia y profesores de la Sección
22.
La marcha estaba convocada para el pasado sábado a las 10 de
la mañana (9 de la resistencia), poco a poco se fueron aglutinando los
contingentes de las diversas regiones y de organizaciones sociales. El objetivo central de esta movilización, era
el de responder al desalojo del día anterior en el Distrito Federal, del que
fueron objeto los compañeros de las diversas secciones de la CNTE, entre ellas
la Sección XXII. En dicho desalojo, los maestros fueron obligados a subirse en
camiones que la Secretaría de Gobernación envió a través de la Policía Federal
para que los maestros regresaran a sus estados bajo la amenaza de hacer uso de
la fuerza y hacer efectivas las órdenes de aprehensión de algunos maestros (implícitamente,
una amenaza directa contra todos aunque no tuvieran órdenes de aprehensión).
Cerca del mediodía, se realizó un mítin en la casa de
gobierno de Gabino Cué Monteagudo, haciendo tiempo para que alcanzáramos a los
maestros que apenas venían en la caseta de Nochixtlán. En este tramo de la
marcha el discurso de la comisión política de la Sección 22 era abiertamente
electoral: “nos vemos el 5 de junio”, “en Oaxaca el PRI no pasará”, “nos
apegamos a los acuerdos emanados de la asamblea estatal de este magisterio
combativo, los cuales mandatan ni un voto al PRI”, “en las urnas los maestros y
el movimiento social haremos sentir nuestras fuerzas”, etcétera. Avanzamos
hacia el Jardín Madero, pues esa fue la decisión que tomaron los dirigentes de
la Sección 22. Una marcha que lucía enorme, pero un tanto gris, en un tono no
tan combativo, pero con el coraje por lo ocurrido el día anterior, se convirtió
en una marcha radicalizada cuando un helicóptero de la Policía Federal comenzó
a seguirnos y a volar muy bajo. De inmediato resonaron las mentadas de madre,
los cohetones, las consignas: “Oaxaca no es cuartel, fuera ejército de él”, “que
sube, que baja, Oaxaca no se raja”, en cuestión de segundos la vanguardia de la
marcha se radicalizó esperando quizá el arribo de la Policía Federal en
camiones conocidos entre los compañeros como “las perreras”. Esto dejó un buen
sabor de boca, demostrando que Oaxaca no está derrotado, además de que la marcha fue muy concurrida y
kilométrica. Una vez que recibimos a los compañeros, el discurso de otro sector
de la comisión política dio un giro de 180 grados impulsado también desde las
bases que hartas de una política timorata coreaban “si no hay solución, tampoco
habrá elección”, la marcha arribó al Zócalo de la ciudad con un tono festivo,
combativo y radical, como estamos acostumbrados a ver a una digna Sección 22,
no la sumisa, agachona y vendida como algunos la quisieran ver.
Al arribar al kiosko del Zócalo, muchos esperábamos discursos
tibios, de medias tintas, inconsecuentes y timoratos, sin embargo no fue así en
esta jornada. Una de las primeras oradoras fue la profesora Yolanda Barranco,
esposa del profesor Damián Gallardo e integrante del Comité Nacional de Presos
Políticos, que comenzó un encendido discurso citando al Che Guevara: “nosotros
no nacimos para ser derrotados, nacimos para vencer”. Quién informó algo que ocultaron
los medios oficiales y también los “progresistas”. En Puebla se estaba dando una
multitudinaria protesta en respaldo a la CNTE encabezada por la Unión Popular de
Vendedores Ambulantes (UPVA), en Guerrero, se estaba movilizando la CETEG, la
Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias (CRAC-PC), resaltó que los 6
compañeros que recientemente fueron liberados en Guerrero (policías
comunitarios) ya se estaban sumando e impulsando movilizaciones en respaldo a
la CNTE.
Le siguió la presidenta la Coordinadora Estatal de Padres de
Familia (Oaxaca), quién resaltó que esta coordinación ya había tocado las
puertas del IEEPO en dos ocasiones: “los papás llamamos una vez, dos veces,
pero la tercera es la vencida, que se escondan porque vamos a ir por ellos”, “que
caben más fosas, que hagan más cárceles, porque no bastarán para detener este
gran movimiento”, un discurso verdaderamente inspirador que terminó declarando “si
no hay solución, tampoco habrá elección” “ que lo escuche bien Peña Nieto, el
sargento Nuño y Gabino Cué, ya nos han robado todo, hasta el miedo”.
A continuación una representante de la costa de la Sección
22 que destacó el sentir de muchos maestros que están viajando con padres de familia
de todas las regiones, haciendo gastos extraordinarios y viajando hasta 12
horas para llegar a la capital. Hizo un llamado a todos los maestros que no se
están movilizando, que no están en el paro indefinido para sumarse, que salgan
de sus guaridas, “que se escondan, porque iremos por ellos cuando regresemos a
nuestras comunidades, ni siquiera nos van a poder mirar a la cara” entre otras
cosas, dijo que “sabemos que tenemos un
compromiso en las aulas y en las comunidades, porque somos gente de palabra, también sabemos que
en algún momento tendremos que replegarnos, pero de manera ordenada, no así, no
como lo pretende Aurelio Nuño y Enrique
Peña Nieto, a base de desaojo, de violencia, porque no tenemos miedo a ser despedidos,
y que se atrevan a despedirnos a todos, porque no somos mil 119, somos muchos
más y aquí se lo estamos demostrando”.
Así las cosas, ahora la tarea es seguir haciendo labor de
conciencia donde no la existe con padres de familia y comunidades que no están
enterados sobre cómo nos afecta a todos la reforma educativa que en realidad es
precarización laboral y privatización de la educación.
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