Quién es Orlando Barrantes y porqué está preso





Orlando Barrantes ha sido sentenciado en Costa Rica a doce años de prisión por hechos ocurridos hace 15 años y en los que no tuvo responsabilidad. Junto con Iván Angulo, habían pasado por seis juicios que habían ganado pero que la Fiscalía había logrado se anularan. Barrantes ha estado en varias ocasiones en México, invitado por el Partido Obrero Socialista. Es uno de los principales dirigentes sindicales y populares de su país y encabeza el Movimiento de Trabajadores y Campesinos. Urge una inmediata campaña internacional por la libertad de estos dos compañeros.

A continuación, un texto que escribimos hace diez años, publicado en el primer número de la revista Pluma, en vísperas de uno de los juicios con los que Orlando ha sido acosado por las autoridades ticas. Firmado por el Comité internacional Orlando Libre, es necesario reactivar este organismo para coordinar las acciones por su inmediata libertad.

Barrantes Cartín es el Secretario General de CONATRAB (Consejo Nacional de Trabajadores Bananeros), organización que aglutina a miles de trabajadores y ex-trabajadores bananeros que fueron expuestos al agroquímico Nemagón (DBCP) en las plantaciones costarricenses durante la década de los años ’70 y que vienen librando una dura lucha desde hace varios años en procura de justicia. A partir de noviembre de 2004 estos obreros agrícolas han presentado demandas en cortes norteamericanas en contra de las transnacionales Shell Oil, Occidental Company y Dow Chemical, fabricantes de Nemagón (1,2, Dibromo-3-cloroprano) y las transnacionales productoras y comercializadoras del banano Standard Fruit, Del Monte y Chiquita Brand.

El Nemagón fue usado como pesticida para combatir nematodos en las plantas, pero fue aplicado sin ningún tipo de advertencia y los obreros bananeros no usaron trajes protectores. Este agrotóxico provoca esterilidad, impotencia, cánceres en hígado, riñones y estómago, serio problemas en la vista, daños permanentes en la piel. A las mujeres les causa alteraciones hormonales y abortos y a su descendencia malformaciones congénitas.

En su relación con el ambiente, el DBCP se descompone muy lentamente en el suelo y se calcula permanecerá allí unos 140 años. Es un pesticida muy persistente y móvil. Químicamente es altamente soluble en agua, inclusive en cantidades muy pequeñas. La sustancia tóxica se filtra a las capas de aguas subterráneas. De acuerdo con la información disponible, se sabe que un derivado del DBCP fue utilizado en las bombas arrojadas por Estados Unidos en la segunda guerra mundial y fue prohibido su uso en ese país en 1977, no así en los otros países en los que se usó durante muchos años más. En Costa Rica se calcula que se usaron 5 millones de kilos durante 10 años. Los daños que causó y que siguen padeciendo cientos de miles de trabajadores de distintos continentes han hecho concluir a especialistas que su uso constituye la peor tragedia en la historia mundial de la medicina laboral. Como parte de la llamada docena sucia, el DBCP es considerado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como altamente tóxico.

Compañías depredadoras

A la fecha, Orlando y su organización han presentado unas 1600 demandas judiciales que están siendo tramitadas en los juzgados norteamericanos. Se contempla presentar 1 000 más. Trabajadores nicaragüenses aquejados por el mismo mal ganaron recientemente en los tribunales norteamericanos sus casos, lo que podría ocurrir con los afiliados a CONATRAB. En tal caso, las compañías responsables deberían de erogar cantidades multimillonarias. Se calcula que si todos los obreros expuestos al DBCP en los 12 países donde se utilizó presentaran su reclamo y lo ganaran, esas empresas deberían pagar indemnizaciones por un monto superior a los 5 mil millones de dólares.

En el pasado, el líder hondureño de los obreros bananeros afectados, Medardo García, quien también procuraba tramitar demandas similares, fue asesinado a la salida de una asamblea de trabajadores. Luego, dirigentes nicaragüenses de este sector obrero denunciaron seguimientos sospechosos e intimidaciones. Por la misma época, a la salida de un supermercado Orlando Barrantes fue amenazado de muerte por su participación en este conflicto. Más recientemente en julio de 2004, Orlando fue agredido en una zona bananera por un individuo de apellido Campo, alias “El Loco”, quien le causó numerosas heridas. Afortunadamente fue auxiliado rápidamente por lugareños en el momento en que su agresor sacaba un cuchillo. “El Loco” actualmente está preso por el asesinato de otra persona y por su vínculo con un caso de robo de armas. Las motivaciones de este ataque quedaron en el misterio, aunque en la zona no es extraña la práctica del pago a sicarios.

Las causas de los de abajo

Otra de las luchas de CONATRAB es la defensa de los pequeños agricultores y de los campesinos sin tierra. Actualmente esta organización mantiene “tomas” de tierra en ocho lugares.

Orlando es también coordinador nacional de más de 40 organizaciones que luchan por vivienda, agrupadas en la Coordinadora de Vivienda Techo para Costa Rica. Este año, el Ministerio de Hacienda de Costa Rica, obediente de los dictados de los organismos financieros internacionales, redujo drásticamente el presupuesto destinado a este fin, de 32 millones a sólo 22 millones de colones, lo que ocasionó masivas y enérgicas protestas durante los días 7 y 22 de junio, que rodearon la casa presidencial. Estos justos y pacíficos movimientos populares, en procura de vivienda popular, fueron encabezados por Orlando y causaron la renuncia a fines de ese mes del ministro del ramo.

Barrantes igualmente encabeza la lucha para que la Caja Costarricense de Seguro Social dote de equipo, plazas e instalaciones médicas a comunidades pobres. Este esfuerzo ha resultado, entre otros logros, en que el edificio del Hospital de Guápiles destinado a neonatología y pediatría se encuentre entre los más modernos del país en zonas rurales.

Barrantes es presidente del Movimiento de Trabajadores y Campesinos (MTC), una organización que recientemente logró su inscripción legal y que podría llevarlo a ser diputado.

El juicio

El pasado 5 de julio inició en el Tribunal de Juicio del Segundo Circuito Judicial de la Zona Atlántica con sede en Guápiles el juicio contra Orlando Barrantes e Iván Angulo por hechos ocurridos hace cinco años, cuando la fuerza pública intentó detener una manifestación pacífica de obreros bananeros afectados por el DBCP y hubo un enfrentamiento en el que algunos policías antimotines fueron retenidos por la multitud. Este hecho lo distorsiona el Ministerio Público calificándolo de “secuestro extorsivo”, y pide 60 años de cárcel para el luchador social en un proceso en donde están ausentes las más elementales normas jurídicas y de justicia. Entre otras cosas, la defensa denuncia que hay una completa nulidad en la actuación del Ministerio de Seguridad Pública y del Ministerio Público, una nulidad absoluta por violación al debido proceso de todo lo actuado por violación al principio de intimación, así como utilización de prueba espuria.

El principal testigo de la Fiscalía es el ex-jefe de la policía antimotines, Orvil Ruiz, despedido posteriormente de la Fuerza Pública por falsificar documentos. Ruiz ha presentado un falso testimonio, contradictorio incluso con el testimonio brindado por su propio jefe, el Director Nacional, que absuelve a Barrantes. El testimonio de Ruiz está lleno de expresiones políticas que incriminan a los acusados por sus actividades sindicales y comunales.

Recientemente, ante gestiones de la defensa, el juicio fue anulado. El Juzgado está por notificar la fecha de inicio del nuevo juicio. Esto nos da un breve respiro para ampliar la campaña a favor de los acusados.

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Por otra parte, apareció en la prensa de Costa Rica la noticia de que dos diputados han presentado un hábeas corpus (parecido al juicio de amparo) para liberar a los presos.

SE TRATA DE IVÁN ÁNGULO Y ORLANDO BARRANTES, A QUIENES SE LES CONDENÓ A 12 AÑOS DE PRISIÓN

Acogen hábeas corpus a favor de dirigentes limonenses

18 DE SEPTIEMBRE DE 2015

11:56 AM

MARIELOS GUTIÉRREZ VARGAS 

Otto Gue­va­ra y Ge­rar­do Var­gas del Mo­vi­mien­to Li­ber­ta­rio y del Fren­te Am­plio, tu­vie­ron una inusual unión en la pre­sen­ta­ción del há­beas cor­pus. CRH.

La Sala Cons­ti­tu­cio­nal aco­gió para su es­tu­dio el re­cur­so de há­beas cor­pus.  pre­sen­ta­do el jue­ves en forma con­jun­ta por los dipu­tadosGe­rar­do Var­gas de Fren­te Am­plio y Otto Gue­va­ra del Mo­vi­mien­to Li­ber­ta­rio a favor de Iván An­gu­lo y Or­lan­do Ba­rran­tes, di­ri­gen­tes li­mo­nen­ses, que fue­ron  con­de­na­dos a 12 años de pri­sión, des­pués de seis jui­cios an­te­rio­res.

A An­gu­lo y a Ba­rran­tes se les en­con­tró res­pon­sa­bles como co­la­bo­ra­do­res o ins­ti­ga­do­res del se­cues­tro de 7 po­li­cías en un even­tos acon­te­ci­do hace 15 años.

La Sala Cons­ti­tu­cio­nal ade­más con­ce­dió 3 días na­tu­ra­les al Tri­bu­nal de Po­co­cí para que pre­sen­te un in­for­me que jus­ti­fi­que la pri­sión pre­ven­ti­va dic­ta­da a los di­ri­gen­tes.

 El fren­team­plis­ta Var­gas  dijo  que pre­sen­ta­ron la ac­ción por­que les  pa­re­ce in­jus­ti­fi­ca­do y ex­tra­li­mi­ta­do haber dic­ta­do acto de pri­sión pre­ven­ti­va con­tra los dos ciu­da­da­nos.

Agre­gó el le­gi­slador, “que  es­pe­ra que una vez re­ci­bi­do el in­for­me so­li­ci­ta­do al Tri­bu­nal de Jui­cio de Po­co­cí por la Sala IV, quede claro que no es ne­ce­sa­rio la pri­sión  pre­ven­ti­va y sean pues­tos en li­ber­tad”.

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